Durante 2003, en el XXII Congreso en Sao Paulo, el por entonces presidente de la Internacional Socialista era recibido por Lula da Silva y la alcaldesa de Sao Paulo y vicepresidente del Partido de los Trabajadores, Marta Suplicy, esposa del comunista argentino Felipe Wermus (a) Luiz Favre, el embajador del Foro de Sao Paulo en Perú.
El presidente de la IS condujo el temario enfatizando en «El papel y la reforma de la ONU» creando un grupo para su estudio y propuesta.
Pobreza, inclusión, paz, gobernanza en la sociedad global, empoderamiento de la sociedad civil y ong´s: La Declaración de Sao Paulo de la Internacional Socialista hizo un llamamiento a unirse en una coalición global que promueva un orden mundial en favor de la paz, derechos humanos, justicia social, la anti-discriminación e igualdad de género; en razón de dos probables amenazas futuras: nacionalistas y conservadores; encontrando a estos grupos con capacidad para desmantelar este nuevo orden global, «que tenga como piedra angular una ONU reformada y modernizada».
Proclamó una futura nueva Naciones Unidas con «instituciones globales democráticas para formular y llevar a cabo políticas en nombre de todos los seres de la Tierra»; siendo esto posible con la reforma de la Carta ONU y la democratización del Consejo de Seguridad.
Un nuevo mundo multipolar con justicia y cohesión social, tolerancia cultural y religiosa para sostener la paz global.
Un pacto global propuesto por la Internacional Socialista:
Integración de los países en vías de desarrollo a la economía global.
Ampliación de asistencia financiera a los países en vías de desarrollo.
Inclusión financiera de todos los trabajadores.
Economía digital.
Regulación de los sistemas financieros.
Derechos reproductivos de las mujeres.
Creación de un nuevo impuesto global para financiar bienes públicos globales.
Abolición de los paraísos fiscales.
Cuota de género (femenino).
Mayor participación de ong´s o sociedad civil.
Gobernanza medioambiental mundial.
Interregionalismo: para alcanzar la gobernanza global.
Empoderamiento ciudadano de los valores sociales, ecológicos y democráticos.
Fin del Estado-Nación: reemplazo por organizaciones globales.
Construcción de identidad global.
Sociedades abiertas.
Creación de un Consejo para el desarrollo sostenible.
Creación de un gravamen para el desarrollo global.
Creación de un fondo de solidaridad mundial.
Favorecer el empoderamiento de colectivos de derechos humanos
Impulsar mayor seguridad individual, para esto es necesario ampliar la inclusión social y desmitificar la «sensación de inseguridad» de los ciudadanos, producida por efectos de la mediatización global.
Derecho a identidad cultural global.
Derecho a democracia global.
Eliminar la brecha digital.
Creación de nuevas estructuras de democracia global.
Nueva estructura política global.
Transparencia. Datos abiertos. Acceso a la información.
El entonces presidente de la Internacional Socialista era António Guterres, hoy Secretario General de la ONU.